lunes, 5 de septiembre de 2016

Jornadas por la Paz y la dignidad


Decenas de corredores de múltiples nacionalidades recorren el continente en una carrera de relevos que tiene una sola meta :LA UNION DEL AGUILA Y EL CONDOR

Con el objetivo de unificar con los bastones de mando de los pueblos de América a todos los pueblos, en un manto fraterno de unidad que cuenta con seis meses para llegar a Panamá saliendo desde Alaska y a Panamá saliendo desde la Patagonia. Recorriendo 20 mil kilómetros. En las dos rutas. La que viene del sur llamada del Cóndor y las flechas que vienen del norte llamadas del águila.

Las jornadas de paz y dignidad se llevan a cabo desde 1989 trazando un continuo esfuerzo del pueblo que se une al rezo de los abuelos y abuelas que decidieron ofrendar de esta manera por lo que más necesitamos en el continente.  La unidad y la fraternidad. Dar a conocer una forma de vida en armonia

Corredores y bastones se van sumando al trayecto como sucedió en California, Durango, Ixtlán del río, Guadalajara.



"De pronto, a lo lejos por esa misma avenida reconocí un bastón con una cantidad abundante de plumas de águila cargado por un joven. El compa, debajo del brillante y claro sol no paraba de mover sus pies incluso en los semáforos en alto. –Ahí vienen detrás más- me aseguro. El bastón que portaba era el águila, la punta de flecha de esta carrera, jornada por la paz y la dignidad… que no es lo mismo que una competencia o un recorrido.

Porque aquí no hay carrera, sino trazos de la historia, rezos de la humanidad y este año principalmente se corre por la semilla nativa, sabiduría resguardada por miles de años en manos campesinas y que hoy está siendo amenazada por intereses capitalistas.
Más de 40 corredores provenientes del norte del continente actualmente custodian más de 150 bastones de mando, que comunidades, familias, pueblos han sumado a estas Jornadas de Paz y Dignidad 2016. Y se seguirán sumando.

Seguí al bastón águila hasta la entrada del zoológico donde aguardaba una camioneta con corredores enrojecidos, sudados, con la mirada limpia y el corazón saltándoles del pecho. Algunos con sus cuerpos abiertos a la frescura de la sombra descansaban mientras que otros saludaban a los recién llegados, con su instintiva sonrisa de amor hecha voluntad"
Los amigos del camino rojo de Jalisco !

“Esto es una cobija espiritual donde cada persona que corre con nosotros es un hilo, y lo está agregando para tener esa cobija lista para cuando entremos a Panamá y nos sentemos con nuestros hermanos y hermanas” José Cortés un corredor jalisciense de 68 años


Este 14 de septiembre tocan tierras tenochcas y hay que recibirlos como se merecen 

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